El crecimiento de tu ejército es fundamental para el éxito en la escena mundial, por lo que es imprescindible que tu nación esté equipada para reclutar, abastecer y apoyar a tus fuerzas.

La construcción de Oficinas de Reclutamiento en tu territorio reclutará y entrenará automáticamente a tus ciudadanos para convertirlos en soldados de infantería, que formarán el grueso de tu ejército.
Naturalmente, no puedes ganar una guerra sólo con números, por lo que puedes diversificar tus fuerzas construyendo estructuras avanzadas como cuarteles, talleres y fábricas, puertos y aeródromos. Estas estructuras desbloquearán unidades terrestres más peligrosas, como la caballería o los tanques, así como aviones y barcos de guerra.

Recuerda: cuanto más flexible y diverso sea tu ejército, más opciones estratégicas tendrás.